9 de noviembre de 2008
Sobres sorpresa
Juguete sexista donde los haya, ibas al quiosco, lo pedías, y el quiosquero a ojo de buen cubero y siguiendo criterios estrictamente sociológicos y antropológicos, te recetaba un sobre sorpresa para niños o para niñas, lo bueno de tener el pelo larguito y parecer una niña es que pude disfrutar de los sobres de niñas y así poder construir cocinitas para mis aguerridos vaqueros y soldados.
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Yo recuerdo sobre todo un cuarto de baño con su bañerita, su ducha, su alfombrilla de baño y un niño, todo del mismo color, incluido el niño.
ResponderEliminarA las niñas nos daban sobre sorpresas de niño cuando no les quedaban de niñas. ¿harían lo mismo con los niños si se quedaban sin sobre sorpresas de niños?
La decepción más grande que me llevé con un sobre sorpresa fue una vez que abrí uno y dentro solo había una bolsa con coco rallao. No lloré, pero casi.
Te acompaño en el sentimiento sorpresa sorpresa, cosas de ese tipo hacen perder la fes en el género humano.
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