Junto con los cigarrillos de choco, que merecen post aparte, uno de los jugues más simples y divertidos, les había más complejos que actuaban como pistola de agua.
¡El mío era como los de las fotos! Con un agujerito en la parte superior. Cuando estrujabas el mechero el chorrillo de agua saltaba. Entre este mechero y los cigarros de chocolate hacía unos simulacros de fumeteo dignos de un Oscar. No fumo pero anda que si fumara tendría une estilazo bestial con toda esa práctica.
Ahora que por fin hemos conseguido la madurez, es un decir, y tenemos la vida felizmente irresuelta, es el momento de mirar hacia adelante, de volver al paraíso, sin nostalgias, se tiene nostalgia de lo que se ha perdido, y en nuestro caso de la infancia nunca nos hemos bajado ni tenemos la más mínima intención de hacerlo.
El blog pretende ser algo abierto, vivo, un cuarto de juegos, un cuarto de atrás, en el que cualquier tema relacionado con nuestra infancia, por anecdótico que sea, tiene cabida, desde el Colacao a la Nocilla pasando por los cromos, los dibus, las pegatinas, los tebeos, los jugues, las canciones, los libros de texto, y un larguísimo etcetera., toda colaboración, opinión, sugerencia, material, será bienvenido, y agradecido (raulyanita@gmail.com), adultos abstenerse.
raul es un niño con gafas y anita una niña de pelo fosco, que viven en un libro de lengua española de 2º de E.G.B de Anaya.
Aportaciones al blog: raulyanita@gmail.com
¡El mío era como los de las fotos! Con un agujerito en la parte superior. Cuando estrujabas el mechero el chorrillo de agua saltaba. Entre este mechero y los cigarros de chocolate hacía unos simulacros de fumeteo dignos de un Oscar. No fumo pero anda que si fumara tendría une estilazo bestial con toda esa práctica.
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